Y desde luego no de esta manera que os voy a instruir. En casa nos encantan, ya sean fritas, al horno, con salsa, sin… Hoy traigo unas que os van a asombrar de lo ricas que están. Alas de pollo con miel y mostaza. Limpia y seca bien las alitas de pollo, que deben estar separadas. Pon una sartén o cazuela baja a calentar con el aceite de oliva virgen extra, cuando esté caliente, incorpora las alas y añade sal al gusto.
Cortamos las alas y limpiamos bien los restos de plumas y sangre bajo el chorro de agua fría. Los comentarios en esta página están moderados, no aparecerán instantaneamente en la página al ser enviados. Andas en tu especial derecho de comentar de forma anónima, pero por favor, no uses el anonimato para decirles a la gente cosas que no les afirmarías en el caso de tenerlas enfrente. Procura sostener un ámbito interesante en el que la gente puedan comentar sin temor a sentirse insultados o descalificados.
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Mientras se fríen las alitas, prepara el arroz, ponlo a cocer con abundante agua salada, así como indique el bulto. En un bol elaboramos una salsa con las 5 medidas de cuchara de miel y las 5 medidas de cuchara de mostaza. Pasamos cada alita por esta mezcla, empapando bien por ambos lados. Otro punto importante es, dónde preparar las alitas. No las deseamos fritas, por lo que obviamos freidora normal de aceite. Lo que sí vamos a poder usar es una freidora de aire o un horno.
Lo que procuramos es que con el aceite se quede esta mezcla de especias pegadas por toda la área de las alas. Empezamos con la preparación de las alas de pollo. Y vamos a empezar marinándolas. Para ello, en un bol grande, en el que vayan a caber todos y cada uno de los trozos, mezclamos la cerveza, el azúcar moreno y el chile en polvo. Sumergimos las alas, las revolvemos delicadamente a fin de que se impregne la mezcla por todos y cada uno de los lados, tapamos con papel transparente y las dejamos a lo largo de una hora en el frigorífico. En un bol o recipiente pequeño, ponemos la miel, la mostaza dulce, la mostaza de dijon, una pizca de sal y otra de pimienta.
Cuando charlamos de alas de pollo se nos viene a la cabeza un bocado jugoso y crujiente. Y sucede que en tal corte de este animal podemos encontrar la mezcla especial entre la carne del interior y la piel que la rodea. En verdad, con unas escasas especias podemos obtener un resultado excelente.
Agregamos el ajo y la cebolla realmente bien picados y removemos con unas varillas hasta que se integren todos y cada uno de los elementos. Por último en la bandeja de horno con las patatas y cebollas, coloca las alas encima y con la salsa sobrante puedes pincelar un poco el pollo. Calentamos y añadimos el ajo en polvo, la cebolla, el perejil, sal, pimienta y la nata para cocinar. Aquí encontrarás recetas de cocina caseras, habituales y fáciles de elaborar.
Elementos De La Receta:
Nos encontramos frente a un corte muy asequible, ya que su precio oscila, en su mayor parte, entre los 4 y cinco euros el kilo. O sea, que por unos cinco euros tenemos la posibilidad de tener 12 alas de pollo, lo que partidas en dos nos tan un total de 24 trozos. Horneamos nuestras alitas en una fuente de horno. Unas pechugas de pollo con salsa de limón. Con la acidez de el cítrico y la suavidad y textura del pollo.
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Añade las alitas de pollo que estén doradas y deja que se integre todo el grupo unos 2 minutos. Supongo que os agradan las alitas de pollo. Y si no es de este modo es pues las habéis probado poquísimo.
En una sartén calienta aceite de oliva y en el momento en que llegue a la temperatura idónea, añade las alas de pollo, no lo pongas altísimo el fuego pues las alitas salpican bastante aceite. Ves dándoles vueltas a fin de que se vayan dorando, ayúdate de unas pinzas para hacerlo y así evitarás quemarte en el momento en que salte el aceite. Precalentar el horno a 200ºC y elaborar una fuente o bandeja.
En un cazo ponemos aceite, una cucharada. Y añadimos el marinado que nos quedó de las alas. A fuego medio alto, Les ofrecemos vueltas para que se hagan por doquier igual. Para finalizar, vamos pasando las alas una a una por la mezcla de mostaza y miel, intentando que queden bien cubiertas.
Si les apetece preparar unas ricas alas de pollo para chuparos los dedos, les acercamos una nueva propuesta, son estas Alitas de pollo con salsa de mostaza y miel. Las acompañamos con algo de arroz ligeramente aliñado, pero suficiente, ya que son las alitas las que agasajarán a nuestro paladar con su sabor. Aparte en otra sartén con aceite, sofreír los trozos de alas de pollo, previamente sal y pimienta, hasta el momento en que estén doraditos.. Agregar la Salsa y cocinar el pollo con la miel, mostaza y el cilantro en la sartén durante unos minutos más…hasta que la salsa se haya espesado…
Cuando las patatas estén doradas, retiramos sobre un papel absorbente para remover el sobrante de aceite, agregamos un toque de sal y listo. Sacar las alitas en el momento en que se hayan dorado, colorear con la salsa y reservar lo que sobre. Volver a hornear a lo largo de unos minutos mucho más, hasta el momento en que las alitas estén bien cocinadas en su punto por ambos lados. Lavamos bien las alitas, quitándoles todas las plumas y las partimos en el medio si no vienen ya cortadas. Secamos bien, salamos y les ponemos ajo en polvo a cada una de ellas.
Preparamos una bandeja de horno con una lámina de papel encerado. Yo le doy un punto picante a la salsa para que no sea demasiado dulce. Ummm…que pinta tienen estas alitas de pollo…esta receta la preparo seguro. En una fuente para horno colocamos papel de horno y ubicamos las alas ya adobadas. Me agrada bastante cocinar y estudiar toda clase de manualidades . Pasar en todo momento posible con mi familia .Me gusta bastante la naturaleza y los animales .
Pasos De La Receta
Así que no lo vaciles y prueba este particular plato de alas de pollo con salsa de mostaza y miel. Alitas de pollo con salsa de mostaza y miel, una receta exquisita y fácil de elaborar en pocos minutos. Este plato te servirá como una original entrada a algún otro plato de carne. Incluso puedes servirlo como plato único, acompañado de una ensalada o de unas patatas como he hecho yo.