Esto es, cocínala a fuego medio – bajo hasta el momento en que quede transparente y blanda. Añadir las espinacas lavadas antes y asimismo troceadas a la olla y combinar con todo. No necesitaremos solamente tiempo de cocción, sencillamente con mezclar las espinacas con el caldo y se queden tiernas va a ser más que suficiente. Por último, agregar el perejil ligeramente picado y mezclar todo. Para que la crema resulte mucho más agradable, la pasamos por un colador para desechar de este modo las pieles de los guisantes.
En el momento en que estén pochadas, añadir las patatas peladas y troceadas, el caldo de ave y la nata. Dejar cocer hasta que las patatas se ablanden y entonces apartar del fuego la olla y añadir los guisantes. Esta receta de crema de guisantes la podemos realizar del mismo modo con guisantes congelados, pero sí podemos aprovechar la temporada de guisantes que es ahora bastante superior. Personalmente es raro que me encantan los guisantes frescos y odie los guisantes congelados, esto es, no puedo ni observarlos. En el instante de servir la crema de guisantes, coloca unos puntos de nata espesa sobre ella y unos picatostes.
Crema De Guisantes
Si ponemos todo el líquido de cuajo luego no podremos corregir de consistencia. Ahora, pasa todo por la batidora y después tamiza con el chino la crema. La base de mi cocina es el maximo respeto por cada producto en la busqueda de una explosión de sabores genuinos que consigan evocar nuestra esencia, el mar y la montaña. En varias zonas usan las vainas pero a mi realmente no me gustan. Muchas veces lo que me ocurría es que trituraba todo recién cocido y me salí una “sopa”, entonces es mejor eliminar todo y después poco a poco añadir el caldo.
Asimismo la puedes acompañar con unas virutas de polvo de jamón para darle un toque diferente. En el momento en que ahora tengamos nuestra crema de guisantes y espinacas bien desmenuzada, poner a puntito de sal y pimienta negra y volver a machacar para que se mezcle bien. Cocemos la mezcla de patatas y guisantes a lo largo de 30 minutos a fuego suave si bien, antes de dar por finalizada la cocción, comprobaremos que la patata está cocida.
Crema De Calabaza, Receta Casera Y Exquisita
La crema de guisantes aportará colorido y gusto a tu menú con un tiempo reducido. Después, cuece en ese agua colada los guisantes con las cebolletas, un chorro de aceite de oliva y sal. LLevar otra vez la crema al fuego y dejarla hervir un momento. Corregir el punto de sazón y servir la crema con unas virutas de jamón serrano crudo o salteado.
Trituramos los ingredientes ya cocidos hasta conseguir una crema sin ningún trozo y rectificamos de sal y pimienta. Recibir un e-mail con los siguientes comentarios a esta entrada. Guardar mi nombre, mail y página web en este navegador la próxima vez que comente.
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Además de esto son muy bajos en calorías, por lo que tenemos la posibilidad de consumirlos en una dieta hipocalórica de manera perfecta. Para el emplatado, se puede emplear un plato hondo al modo tradicional, pero también puedes probar con un cuenco o un vaso. Puedes ser útil esta crema fría o caliente, en dependencia de la época del año en que la prepares. En el momento en que el aceite esté ardiente, añade la cebolla y póchala.
Siempre defiendo que la clave de cualquier crema es que tenga gusto y que quede bien sedosa, lisa, sin tropezones, satisfactorio de comer; y para eso solo hay un secreto y es el de machacar todo muy, muy realmente bien. Prácticamente olvidarnos la crema en el vaso de la batidora o del robot de cocina porque sí, hay una diferencia colosal entre realizar una crema en vaso que con batidora de mano, algo que no recomiendo. Podemos realizar esta crema con guisantes congelados, con guisantes cocidos y, más que nada, con guisantes tiernos, de temporada, pero claro, esta última opción es la que menos económica nos va a salir. Por el momento no os cuento si elegís la variedad lágrima a la que se conoce como caviar vegetal. Yo la hice con guisantes congelados pues como soy muy de improvisar esta opción me viene siempre y en todo momento fetén. Pero cuando llegue la primavera igual me doy un homenaje.
Crema De Guisantes Con Queso Curado Y Toque De Trufa
Añade la mantequilla en dados y también intégrala bien en la crema. Desmenuza la mezcla con una batidora potente hasta conseguir una crema fina, sin grumos.
En un cazo a fuego despacio, volcamos 30 ml de aceite de oliva y pochamos 1 cebolla troceada. No hace falta que los trozos de la cebolla sean pequeñísimos en tanto que acabarán triturados al final de la cocción. La temporada de los guisantes va de marzo a mayo, así que si deseáis cocinar este plato fuera de estas fechas, podéis usar guisantes congelados con un resultado realmente bueno. La crema de guisantes que haremos con esta receta tiene un gusto muy divertido y una textura muy mantecosa. Lo mejor es tomarla calentita acompañada de unos picatostes junto con ciertos guisantes salteados. Si cocemos los ingredientes con caldo de pollo o caldo de verduras enriquecemos considerablemente más la crema pues va a coger todo el gusto del caldo.
Hay patatas más duras que podrían requerir más tiempo. En cuanto al resto es tan simple como cocinar las verduras unos minutos y triturar todo con una batidora potente hasta obtener una crema fina. ¡No tiene ninguna complicación y el resultado es una delicia! Esta crema se puede tomar tanto fría como caliente, por lo que es un entrante perfecto para cualquier momento del año. Al mismo tiempo que agregamos la patata, incorporamos asimismo 400 g de guisantes congelados, aunque si tenéis guisantes frescos, bastante superior. Reservamos los 50 gramos de guisantes restantes para saltearlos y adornar con ellos la crema.