En décimo puesto está el sofrito casero tomate frito de la marca Gallina Blanca. En un caso así estamos frente a un producto que tiene 0,7 gramos de grasas saturadas, 11 gramos de azúcar y 0, 4 gramos de sal cada 100. Si quieres hacerte un buen tomate frito en casa, solo tienes que cocinar el tomate natural triturado , añadir un poco de sal al gusto y si queda ácida un poco de azúcar. Cocinar este tipo de preparaciones es muy sencillo, pero en la mayoría de ocasiones, optamos por comprarlas en el autoservicio.
De cualquier manera, elaborar nuestra propia salsa de tomate nos ofrece el control sobre sus ingredientes. El tomate es un alimento que, raramente, incrementa sus características cuando se cocina. En concreto, Carlos Ríos afirma que combinar el tomate con aceite de oliva deja que el cuerpo absorba en mayor medida el licopeno que tiene dentro.
Si bien no es exactamente lo mismo pues tiene otros ingredientes, como la sal o el aditivo E330. En la segunda posición está el tomate triturado BIO de El Corte Inglés. Su proporción de grasa es de 0,5 gramos cada 100 y su contenido en azúcar es de 2,8 gr. Hida es otra muy buena opción, exactamente la misma el tomate del Mercadona, está elaborado con tomate fresco, aceite de oliva, azúcar y sal (lo único que no lleva es el ajo). Nosotras lo hemos probado y la verdad es que está muy rico, se nota ese punto natural y eso se agradece un montón. Esta fruta, desde el criterio biológico, y hortaliza, desde el punto de vista culinario, es un alimento con una enorme proporción de agua.
De ahí que muchas veces te ofrece pereza freír el tomate y terminas comprando el tomate frito en el supermercado. Como el tomate está conformado por un 94 % de agua, a fin de que se fría en el aceite, primero tiene que perder gran parte de ese agua por evaporación. Los aromas en ocasiones se emplean si faltan ingredientes o estos son de baja calidad. Algún tomate frito especifica que transporta sal “marina”, como si fuera algo particular.
Nutrición
Los tomates son un alimento dulce, nutritivo y polivalente, empleándose para cientos de platos o para consumir solo. Sea cual sea la forma de comerlos, son exquisitos y sanos, además de esto, se tienen la posibilidad de conseguir frescos todo el año. Pela los tomates con una puntilla en vez de escaldarlos durante un par de minutos en agua hirviendo. Se trata de achicar la cantidad de agua que tiene el tomate así sea triturado o entero, pues directamente reduce el tiempo de evaporación y, por consiguiente, el de fritura.
En los envases, primero, precaución con la literatura que se emplea para dar un barniz más saludable o casero al producto y para vender mucho más. Por poner un ejemplo, los términos artesano, tradicional, etcétera., no están regulados y cada desarrollador los usa según su propio método. De sal, en algún tomate frito se debe tener cuidado, en especial quienes deban llevar una dieta baja en sal, como la gente con hipertensión.
Pueblos Reservados Que No Te Puedes Perder
La segunda en la lista la tenemos la posibilidad de hallar en los supermercados del Corte Inglés. Con una puntuación de cinco estrellas, cada por cada cien gramos cuenta con un 0,5 de grasas, que sigue suponiendo un contenido muy bajo. El aporte energético es de 25 kcal cada cien gramos y el envase de 660g vale 1,83€. En un recipiente con tapa, pon 4 medidas de cuchara de aceite de oliva virgen plus , añade el tomate colado y un poco de sal. Hemos inspeccionado en sus etiquetas la composición nutricional y el listado de elementos. Sin embargo, si no nos deseamos complicar, desde una lata de tomate, ya sean enteros, troceados o triturados, tenemos la posibilidad de conseguir resultados inusuales.
El contenido en grasas en nulo, y cien gramos nos aportan 27 kcal de energía. Es preferible conseguir botes de 800 gr de tomate natural triturado plus, ya que tienen menos agua que los de tomate entero. Echar el tomate, eliminar bien, añadir algo de azúcar y regar con el vino. Dejar cocinar a fuego retardado unos minutos, hasta que reduzca.
Variaciones Del Tomate Frito Básico
Uno solo de los tomates, en lugar del E330, lleva fructosa, un tipo de azúcar. Es un tipo de acidulante y sirve, como su nombre indica, para corregir la acidez. Se permite hasta en los artículos bio, donde también está presente. OCU considera este aditivo aceptable y sin peligros.
Cocínalo a fuego medio y sírvelo como mucho más te apetezca. Te proponemos incorporar el tomate frito de la marca Ferrer a esta lasaña vegetal light, es un plato delicioso y en este caso libre de culpa que agradece mucho una salsa de tomate de calidad. Incluso en las recetas de salsas de tomate caseras es frecuente añadir algo. A fin de que tengas una referencia, valores de azúcar en torno al 5% se tienen la posibilidad de estimar admisibles, ya que más de la mitad de esa cifra procede del propio tomate (no se añade). El más semejante al tomate natural es el tomate triturado.
En el análisis, los expertos han revelado que este es un bote saludable, rico, el cual ha sido desarrollado con tomates recién cosechados. No posee azúcares, y así como el producto de pequeños, lo han establecido para este categoría que superó la prueba de calidad. Comercializan una salsa que no es tan aguada, pues además le han añadido trocitos de tomate para que tus comidas queden de gran lujo. Su valoración nutricional es alta y no tomarás grasas sobresaturadas.
Boticaria García recomienda que el porcentaje de azúcar sea 5% o menor. Esto es, si en el etiquetado se miden los nutrientes por cada cien gramos de producto, hay que ver que no haya más de 5 gramos de azúcares. Una aceptable salsa de tomate casera es una delicia para el paladar de la mayor parte. El inconveniente aparece en el momento en que debemos conseguir una de supermercado que esté buena y sea saludable. A través de su comparador nutricional, la Organización de Usuarios y Individuos ha elaborado un listado de diversas salsas de tomate procesadas. En la próxima situación está el tomate receta tradicional de la marca Gvtarra, en un caso así nos encontramos ante un tomate cocinado .
Pero la comodidad y las prisas en la cocina nos llevan a obtener latas, brick o botes de tomate, ya sea triturado, frito o como salsas. ¿Cuál es el producto mucho más saludable desde un punto de vista nutricional? Para responder a esa pregunta, OCU ha comprado 113 artículos de esos tres tipos y ha estudiado sus etiquetas.