Sirve el guiso y decora los platos con una hoja de perejil. Ponemos las patatas cataratas en trozos medianos y removemos el conjunto. Bajamos el fuego pero que lleve a cabo chup chup y cocemos hasta el momento en que la carne y las patatas estén muy agradables. Corta la costilla siguiendo el hueso y el chorizo en rodajas de 1 centímetro, incorpóralos a la cazuela y mezcla bien.
Fundamental que cocinéis con elementos de calidad. Una aceptable costilla, sea de cerdo blanco, tipo duroc, ibéricas o de cebo. Todo es dependiente de la grasita queráis ponerle al guiso. Del mismo modo un óptimo aceite de oliva virgen extra para la base del sofrito y las patatas deben ser para guisar, les sugiero una patata gallega. Y en mi caso, las verduritas son del huerto de mi padre, mejor imposible. Cuando la verdura esté pochada, añade las costillas con su jugo.
Recetas De Rechupete
Sofreímos a fuego medio-alto quitando periódicamente para evitar que se queme. Mientras se cocina la cebolla lavamos y cortamos el pimiento y lo añadimos a la olla adjuntado con la hoja de laurel. Cortamos la costilla en trozos según nuestro gusto, aproximadamente grandes. En una cazuela extensa calentamos 3 o 4 cucharadas de aceite de oliva y doramos la costilla por todos sus lados, en varias tandas si fuera preciso. Retiramos de la cazuela y reservamos la costilla en una fuente y la cazuela con el aceite sobrante.
Un plato económico y simple ideal para preparar en cuaquier comida. Si las picáis finito en el sofrito, van a quedar muy integradas en el guiso después ya que el caldo engordará. Dale un hervor a fin de que se evapore el alcohol y cubre las costillas con agua. Pela las patatas, corta (cascándolas) y también incorpóralas. Karlos Aeguiñano propone una receta de patatas con costilla y chorizo exquisita. Recuerda que los guisos siempre y en todo momento quedan mucho más ricos si cascamos o chascamos las patatas, esto es, realizar una pequeña incisión en la patata y arrancar el trozo.
Recetas
Lavamos y troceamos la zanahoria y también incorporamos a la misma olla. No os pongo tiempos de sofrito, mientras que se lava y corta una verdura, la que está incorporada a la olla se marcha sofriendo. Sirve el guiso y adorna los platos con una hoja de perejil. Cuando vayáis a elaborar un guiso con patatas es importante que estas tengan una buena cantidad de almidón en tanto que espesarán el caldo realizando que tenga una textura mucho más mantecosa. Tenlo presente para conseguir un resultado espectacular. Muestra en una fuente las costillas, al costado pone las patatas, riega todo con el jugo y adorna con una ramita de perejil.
Añadimos ½ vaso de agua y dejamos cocer a fuego medio durante 30 minutos. Dejamos descansar 5 minutos y lo vamos a tener listo para comer, delicioso guiso donde los haya. Servimos bien caliente en un plato hondo y acompañado de un buen trozo de pan. Pelamos las patatas y las troceamos rompiéndolas, sin cortarlas totalmente sino más bien arrancándole pedazos, tronchándolas, a fin de que así suelten su almidón al cocinarse. Añadimos las patatas a la olla y la costilla que contamos reservada.
De esta manera las patatas sueltan mucho más almidón y el caldo quedará más espeso. Salpimentar la costilla y untar con aceite y meter en el horno a 170 ºC tapado con papel aluminio y un vaso de agua en la base, durante 45 minutos. Calentar el aceite en una olla a fuego medio, dorar la costilla y el chorizo. Tenlo presente para conseguir un resultado increíble. Reparte el guiso en 4 platos y adorna los platos con unas hojas de perejil.
Receta de guisote de patatas y costilla, Karlos Arguiñano realiza un cocido de cerdo con pimientos, patatas vino blanco y azafrán. A estas costillas de cerdo al horno de Arguiñano le abrirán de maravilla unas patatas o papas fritas o asadas. También algo de ensalada verde para aligerar el mordisco pero por lo demás es una receta particular. Son muchas las recetas y también inspiraciones que el chef vasco Karlos Arguiñano nos ha dado en cocina. Los guisos siempre y en todo momento y en todo momento quedan considerablemente más ricos si cascamos o chascamos las patatas, esto es, efectuar una pequeña incisión en la patata y arrancar el trozo.
Por supuesto deben ser elementos de calidad, puesto que eso determinará en gran parte el buen resultado final. Recibe un correo electrónico semanal con las novedosas recetas de rechupete. Mientras se marcha realizando el sofrito elaboramos los tomates. Para retirarles la piel podemos escaldarlos en agua hirviendo durante 1 minuto o pelarlos con la ayuda de un cuchillo. Troceamos los tomates en pedazos pequeños y los incorporamos al guiso.
@Adrián Las ñoras sirven con perfección, y cualquier pimiento de carne fina y buen gusto. Dora la cebolla, el pimiento y los ajos | antena3.com Calienta una sartén con 2-3 medidas de cuchara de aceite. Espolvoréalas con algo de perejil picado, añádelas a la cazuela y cocínalas con el guiso durante otros 2-3 minutos.
Te notificamos que los comentarios de cocina-familiar.com están sujetos a moderación por la parte de nuestro equipo.
Ahora, en el momento en que el pimiento empiece a estar blandito, añadiremos la costilla de cerdo cortada en trozos y la vamos cocinando despacio para que quede blandita. Reparte el guiso en 4 platos y decora los platos con unas hojas de perejil. Si aún no habéis tenido la posibilidad de probar esta receta os la recomiendo, ya sabéis, la cocina simple y clásico siempre es un éxito en la cocina y en la mesa. Muestra en una fuente las costillas, al lado pone las patatas, riega todo con el jugo y adorna con una ramita de perejil. Salpiméntalas y dóralas en una sartén con un chorrito de aceite. Como es frecuente en las recetas de Arguiñano, los elementos son simples de hallar y sencillos de emplear.
Ahora agregaremos las patatas cortadas en cachelos. Esto quiere decir que en el momento de cortarlas, vamos a pasar el cuchillo un poco y después tiraremos hacia arriba. Escucharéis un chasquido señal de que estáis rompiendo la patata, lo que causará la fuga posterior de fécula. Luego añadimos algo de sal y tras remover, volcamos el agua suficiente para que las patatas queden sumergidas prácticamente en su totalidad.
Y cocinar para mi familia y amigos todavía es mi gran pasión. En esta web deseo compartir contigo mi experiencia, para que gozes de la cocina tanto como yo y todos tus platos salgan de rechupete. Y no os olvidéis que este guiso esta mucho mejor de un día para otro. Si veis que el caldo no engorda, en el momento que las patatas estén lo suficientemente cocidas, machacáis una hasta hacerla puré y la devolvéis al guiso.