En exactamente la misma olla y con el aceite que hemos utilizado para dorar los muslos de pollo, sofreímos la cebolla troceada en dados. Mantenemos la temperatura medio alta y cocinamos la cebolla a lo largo de unos 20 minutos, hasta el momento en que esté bien blandita. Las pechugas de pollo son vistas de forma frecuente como una parte sosa o hastiada, pero hay muchas preparaciones sensacionales que se tienen la posibilidad de llevar a cabo con ella como protagonista.
Es más, igual que influye en el gusto final de nuestro plato. El género de vino que incluyamos en la preparación de un plato, lo mismo sucede con la cerveza que empleemos para cocinar. He optado por una propia de mi tierra, de ahí que de la morriña, pero eso lo dejo a vuestra elección y a tu gusto.
Muslos De Pavo A La Cerveza Con Arroz Y Foie
En el momento en que la salsa de miel, mostaza y cerveza esté como almíbar añade el pollo y déjalo a lo largo de 2 minutos por los dos lados a fin de que se impregne bien en la salsa. En la sartén que hemos utilizado, agregamos un poco de aceite si fuera necesario para cocinar la cebolla y el ajo y los cocinamos a fuego medio, hasta que se ablanden y la cebolla esté transparente. Ponemos aceite de oliva virgen plus en una sartén gran, salpimentamos los muslos de pollo y los doramos a fin de que la piel quede tostada, dejando la carne al punto.
En la gastronomía española las recetas de guisos y estofadosson uno de nuestros emblemas. Dentro de esta clase de cocina, a buen seguro que jamás falta un vaso de buen vino con el que aderezar la cocción. De la misma forma sucede en otro tipo de gastronomías, en concreto estoy pensando en la cocina alemana.Con la salvedad de que en vez de ser el vino el ingrediente aromático, ellos emplean su famosa cerveza. Y que mejor acompañamiento para esta receta con pollo que una buena cerveza, alemana o de donde más les agrade. En todo Centroeuropa existe esta práctica tan arraigada en su cultura como lo es en la nuestra el estofado con el aderezo del producto de la uva.
Pasos De La Receta
Las introducimos en el horno durante 4 minutos a 190º. Y listo, tenemos unas deliciosas alitas de pollo a la cerveza. Pasado ese tiempo, debemos secar una a una las alitas. Tras ello, las impregnamos de aceite de oliva y esparcimos por encima la cebolla y el ajo en polvo y la sal. Lo que procuramos es que con el aceite se quede esta mezcla de condimentas pegadas por toda la área de las alitas.
Retiramos la piel y restos de grasa de los muslos de pollo. Pelamos y cortamos en dados las cebollas. Cortamos la pechuga del modo que deseemos y untamos su parte superior con mostaza Dijon, cubriendo completamente su área con una cubierta fina.
Como siempre el misterio del plato no es más que los elementos de la mejor calidad posible. También respetar los tiempos de cocción para conseguir una carne tierna y jugosa. Comenzamos con la preparación de las alas de pollo. Para esto, en un bol grande, en el que vayan a caber todos los trozos, combinamos la cerveza, el azúcar moreno y el chile en polvo. Sumergimos las alitas, las revolvemos suavemente para que se impregne la mezcla por todos los lados, tapamos con papel transparente y las dejamos a lo largo de una hora en el frigorífico. En el momento en que charlamos de alas de pollo se pensamos un mordisco jugoso y crujiente.
Muslos De Pollo Marinados Al Horno
Salpimentamos el pollo, y doramos con aceite de oliva en la propia olla. Añadimos el resto de ingredientes, cerramos la cazuela, y desde que suba la válvula dejamos 18 minutos. Un consejo, yo lo dejaría cociendo 5 minutos más a fuego medio para acabar de reducir la salsa, siempre sin cazuela express, quitas la tapa y lo dejas cocinando de manera normal. Agregamos las hojas de laurel, el tomillo, la mostaza y salpimentamos. Removemos para integrar los ingredientes y también incorporamos los muslos de pollo que disponemos reservados. Regamos con la cerveza y completamos con el caldo de pollo o el agua.
Lo que sí vamos a poder utilizar es una freidora de aire o un horno. Como ya hablamos aquí frecuentemente, son 2 electrodomésticos con funcionalidades similares, y vamos a usar la airfry si podemos meter todas las alitas que queremos en su cesto; si no, utilizaremos un horno. Otra de las claves de esta receta es su precio.
Paso 1 «Cortamos El Pollo Y Las Patatas»
Doramos la carne para sellarla hasta el momento en que adquiera color por todas sus caras. Retiramos a una fuente y sostenemos el aceite sobrante de la cazuela. Untamos las alas por los dos lados y las volvemos a poner en exactamente la misma bandeja en las que las hemos cocinado.
En este punto destapamos la cazuela y terminamos la cocción durante 40 minutos más. Como pasa con muchas otras recetas de carnes y aves, las opciones de guarnición son casi infinitas. Estamos de esta manera con muchas opciones para guarnecer la pechuga de pollo a la cerveza.