Laminar el ajo y sofreírlo a fuego suave 2-3 min. Añadir las carnes y el pimentón, sofreír 30 segundos y también integrar el agua o caldo. Todos estaban con curiosidad y también interés por entender de qué manera lo haría el pastor y pidieron que le llevaran a la dehesa en la que se alojaban. El muchacho regreso a palacio, les contó a todos que nunca había comido un manjar tan exquisito como el que le había listo el pastor.
Ubicamos en la superficie y las dejamos flotar hasta que se ablanden. Añadimos sal y pimienta negra recién molida. Probamos el caldo antes de añadir la sal ya que dependiendo de la cantidad de jamón y lo salobre que sea es posible que no sea necesario. Hija de andaluza y de padre catalan, en mi cocina hallaréis la mezcla de mis 2 raices y habituales culinarias. Abrí el blog Gozando de la Cocina en 2009 y mucho más adelante el canal de cocina, desde entonces mi vida ha girado cerca de la cocina.
Una vez han pasado los 15 minutos de cocción, agregamos las visibles, removemos realmente bien a fin de que se formen unos hilos con ellas y a continuación añadimos las yemas. Finalmente, agregamos el pimentón de la Vera y lo removemos bien durante unos 30 segundos. Los ajos no deben estar quemados porque alteran el sabor de la sopa y la estroperan, pero los poco cocinados no dan gusto. Empiezas poniendo una olla con algo de aceite a fuego medio, añades los ajos cortados en rodajitas y cuando estén un tanto dorados los retiras y reservas.
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Esta sopa es una receta de aprovechamientoen la que usas el pan que se puso duro y poco mucho más. Conque ahora vas a ver lo fácil que es elaborarla y lo económica que sale, por dos duros tienes un buen plato de sopa calentita. Terminar con 2 huevos y cocinar 2 minutos más y servir muy caliente. Lo que sí es primordial asimismo es añadir huevo a la preparación.
Yo el jamón ahora lo compro a daditos, pero si vosotros no lo hacéis asimismo se debe cortar y reservar. Primeramente, se deben pelar los ajos y los trituramos con la picadora. También se tienen la posibilidad de laminar, pero en casa escogemos no encontrar tropezones.
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Un año después repitieron caza por el mismo lugar. Y por satisfacer a los Condes se solicitó a unos pastores que hiciesen la sopa de ajo. Cuando las sirvieron en la mesa, el joven proseguía sin estar satisfecho. Ponemos una sartén grande al fuego con aceite y añadimos los ajos, cuando empiezan a dorarse, los retiramos antes que se quemen y los reservamos.
Apagamos el fuego y dejamos que cuajen con el calor residual y la cazuela tapada. Incorporamos el pan y removemos a fin de que se impregne del aceite. Una receta de las habituales y al alcance de todos. Un plato económico, fácil y asombroso.
Añadimos el pimentón y sobre la marcha el caldo de pollo… Y los ponemos en exactamente la misma cazuela agregando otra cucharada de aceite de oliva hasta que estén dorados. Si no tienes pan de sopa, puedes usar algún trozo de pan viejo que te haya sobrado. Si te gusta bien tostado, tuéstalo en el horno.
Yo aconsejo un buen tazón de sopas de ajo como cena, la primera cucharada de sopa ya mete el calor en el cuerpo. Su toque de ajo y su aroma de pimentón me recuerda a las cenas viendo la tele en la casa de mi prima Miriam. Ahora contamos el frío a la puerta y la Navidad prácticamente encima. El cuerpo nos pide recetas de sopas y es lo que toca cocinar. Hace unos días les presentaba una de mis preferidas,sopa de cebolla.
La de hoy es una de las recetas mucho más humildes y reconocidas de la gastronomía española, las sopas de ajo o sopa castellana. Indispensables en Semana Santa y desayuno frecuente en muchas zonas del campo español. Esta sopa es muy caldosa y se cocina con ajo picado. El caldo cocina con pan tostado o rebanadas de pan de pueblo.
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Siguiente Receta
Veremos de qué manera se hacen unas ricas sopas de ajo. El pan que mejor queda es el candeal y es preferible si el pan tiene varios días de reposo en el hogar, lo que tiene por nombre pan asentado. Por el hecho de que al estar duro tiene mucho más cuerpo y queda con mejor textura al ensoparlo. Más allá de que su fachada es realmente simple, es un plato riquísimo, y si no lo has probado, no puedes dejar pasar más tiempo sin hacerlo. Por el hecho de que, si bien no tengas ni idea de cocina es tan fácil y simple que te quedará exquisita. Con la ventaja de que además de esto se hace en un momentito.